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Benjamin Lacombe

El día 12 de julio del año 1982, la bella ciudad de París le daba la bienvenida al que sería un talentosísimo ilustrador y autor Benjamin Lacombe. Sus dibujos tienen un estilo particular marcado por la elegancia, una sombría tristeza y melancolía representados perfectamente a través de la paleta de colores utilizados en cada ilustración.

En el año 2001 comienza sus estudiós en la Escuela Nacional de Artes Decorativas. Paralelamente, inicia sus primeros trabajos en publicidad y animación. Sin embargo, al poco tiempo  los abandona porque quería dibujar y contar sus propias historias  Le encantaba dibujar, quería diseñar y nació un gran deseo por crear sus propios libros. Finalmente, su carrera se bifurca y se lanza a probar suerte con la ilustración.

Lacombe se sintió inpirado por diversos artistas del Qualtrocento, los prerrafelistas pero también por el cine y directores que tienen una estética única y original como lo son Tim Burton, Pedro Almodóvar y  Hitchcock.  La fotografía también a ocupado su mente, especialmente aquellas  que toman aspectos de la pintura, admira profundamente a los fotógrafos  Gregory Crewdson, Desiree Dolron, Erwin Olaf.

El autor plantea que sus libros están dirigidos a los niños, jóvenes y adultos (es loco pensar que dentro de la librería siempre encuentro todas sus obras en el sector de literatura infantil). Veamos algunas de sus publicaciones...

Caperucita Roja (2004)

Los Amantes Mariposa (2007)

Alicia en el País de las Maravillas (2015)

Cuentos macabros (2009)

Blancanieves (2010)

Nuestra Señora de París (2011)

Historias de fantasmas de Japón (2019)

Madame Buterfly

Curiosidades

• Una marca personal del dibujante es incluir en sus ilustraciones a Virgile, su perro. El autor asegura que esta marca es captada rápidamente por sus lectores más allegados.

• Dibuja sonrisas, pero no son completas. Sus personajes nunca muestran los dientes, esto lo hace ya que admira profundamente a Leonardo da Vinci, él nunca dibujó una sonrisa abierta a todo. Sus sonrisas son sonrisas enigmáticas.

Opinión

¿Qué puedo decir sobre este hombre? Nada, simplemente las palabras sobran ante tanta belleza. Es inevitable no entrar a la librería y darle una hojeada a sus libros. Las ilustraciones acompañan los clásicos de la literatura de una manera increíblemente hermosa. Y no hablo solamente de los dibujos, todo el libro en sí es arte puro, desde las tapas duras y labradas, las letras, la guarda, sus hojas son de una muy buena calidad, el detalle del señalador, etcétera. Además, deben tener en cuenta que solo subí algunas de sus obras porque tiene muchísimas más y cada una supera la magnificencia de la anterior (puedo sonar exagerada y lo sé).

Solo debo decir algo negativo: los libros son carísimos. Y carísimos me refiero a que una buena parte del sueldo se vaya en la compra de uno de estos ejemplares, pero si te gusta tanto la literatura como a mí no podés perderte de semejante belleza ilustrativa en compañía de los clásicos que han dejado huella en nuestro camino de lectura en algún momento de nuestra vida.